La importancia del ocio y las aficiones en nuestros días es algo constatable. La tecnología ha conseguido democratizar la posibilidad de viajar a cualquier parte del mundo. Hasta finales del siglo XIX, muchos movimientos de la sociedad estaban motivados en especial por las guerras o la migración, así como por el comercio. Las personas que viajaban lo hacían porque tenían que hacerlo, no porque quisiesen. Todo esto cambió y ahora las personas viajan también por ocio.
El tiempo libre
La necesidad de disfrutar el tiempo libre es una realidad y esto hay que tenerlo muy en cuenta. Esto también ha motivado que hayan nacido muchas páginas webs que respondan a estas necesidades en la red. Desde Cerámica para Arquitectura han sabido responder a todos aquellos que tienen la creatividad en su interior o que simplemente gustan de algo diferente y más personal.
En el caso del turismo del que antes hablábamos, muchos negocios también buscan ser complementos para las visitas turísticas que se realizan.
Cambiar la clásica idiosincrasia de las aficiones y del ocio
No hace falta pensar en ideas de conspiración, puesto que las definiciones capitalistas nos dicen que hay una serie de necesidades que deben ser cubiertas con los beneficios a nivel producto que puede obtener el trabajador cuando hace su actividad profesional.
El ocio debe ser rediseñado y no asociarla de forma directa al gasto de dinero, por ejemplo, hay que pensar en que viajar o tener un hobby es una buena forma de pasar nuestro tiempo libre y el trabajador queda protegido por un conjunto de normas de trabajo que quedan reguladas.
Cuando hablamos de negocio, debemos tener claro que el objetivo es trabajar para poder sacar el máximo dinero para la compra de bienes que el propio trabajador crea con su propia labor.
El ocio y el turismo en la edad de la información
Las barreras de entrada a la hora de adquirir un billete de avión han pasado a reducirse de forma drástica en los últimos años, lo mismo que un acceso a la información a la que ahora se puede acudir casi desde cualquier sitio, con lo que actualmente se puede viajar desde donde queramos.
Muchas veces cuando se viaja se buscan los Free Tours que nos enseñan la ciudad y son una excusa para que por unas horas gente desconocida se reúna con un guía para ver la ciudad, solucionar nuestras dudas y conocer quizá a gente con la que pasar un buen rato. Lo mismo podemos decir de las personas que acuden a cursos gratuitos de todo tipo de cosas o también si son de pago.
Actualmente, y gracias a que todos tenemos una especie de miniordenador de bolsillo con el que poder acceder a la red de redes, ya no es necesario planificar lo que queremos ver pues se puede consultar de manera sencilla.
Ahora es mucho más fácil que en el pasado y esto hay que aprovecharlo, aunque también es cierto que la oferta en cuanto al turismo y el ocio en general es mucho más grande que la que existía hasta hace unos pocos años. Vivimos una época de interconexión en la que realmente sin salir de nuestros hogares podemos llegar a disfrutar de infinitas posibilidades de diversión.
A pesar de todas estas facilidades, creo que el ocio y las aficiones siempre se disfrutan más cuando esto se hace en verdadera compañía, pues todo es más bonito cuando se comparte.
Lo que debemos tener claro es que hay que informarse siempre bien y valorar cuáles de las opciones existentes son las más interesantes para nosotros, pues así es como vamos a poder hacer una elección mejor de todo lo que consideremos necesario.
Una vez dicho esto, esperamos que todas estas palabras sean de utilidad y al menos os ayuden a dar valor al tiempo de ocio y a las aficiones que podamos tener, pues no solo permiten que lo pasemos bien, también pueden ser geniales para nuestra salud mental, especialmente en estos tiempos en los que el estrés de la vida diaria hace tanto daño y causa tantas muertes por enfermedades coronarias.
El mejor consejo que podemos daros es que aprovechéis todas las posibilidades a vuestro alcance, pues al final se trata de pasarlo bien y disfrutar con mayúsculas de todo lo que en la sociedad occidental tenemos al alcance de la mano.
Ahora es vuestro turno y ya sabéis, a pensarlo bien y a elegir entre las opciones que tengáis sin lanzaros a por la primera oferta que veáis, merece la pena pensarlo con calma.